El tomate del Severo Ochoa
Por Almudena Negro.
Aquí hay tomate. Y no me refiero al programa de prensa del corazón por todos conocidos –aunque nadie reconozca ser habitual espectador de la cosa- que emitía Telecinco y que fue retirado por sorpresa –unos dicen que por oscuros motivos, otros que simplemente ante la caída de audiencia- de la parrilla televisiva. No me refiero tampoco a la traca final del “tomate” contra Zarzalejos, director del diario ABC. Nada de eso.
Me refiero al macabro follón que desde el PSOE se está intentando organizar con la excusa de una sentencia (que yo acato, faltaría más, pero no tengo por qué respetar; es decir no tiene por qué parecerme bien y, como aún existe la libertad de expresión, puedo decirlo. De hecho, algunas sentencias me parecen vergonzosas) dictada por, entre otros, dos jueces, uno de ellos vinculado a la política y socialista Fundación Alternativas, que en su día suscribieron un manifiesto a favor de la eutanasia- con respecto a lo sucedido en el madrileño hospital Severo Ochoa, cuyo servicio de urgencias era dirigido, hasta estallar el escándalo por todos conocidos, por el doctor Montes. Vamos, que el PSOE está volviendo a hacer lo habitual: chapotear en sangre a ver si recoge algún fruto en forma de voto.
Vamos a los hechos: ¿sabían ustedes que el índice de mortalidad en el servicio de urgencias disminuyó un 55% tras ser cesado el doctor Montes? 55%. Se dice pronto; hablamos de vidas humanas y parecería normal que la labor de un médico que cumpliera con su juramento hipocrático fuera salvar vidas. También parecería normal que el mejor gestor de un servicio de urgencias fuera aquel bajo cuyas órdenes un mayor número de pacientes salvaran sus vidas. Pues no. Parece ser que para la izquierda esto no es lo normal. Lo de “médico salvar vidas” debe ser “un concepto discutido y discutible”.
¿Sabían ustedes que el puesto de trabajo del cual fue cesado es un puesto de confianza, o sea, de libre designación y que es algo muy normal ser cesado de esos puestos? Tampoco debe de ser normal para la izquierda cesar en sus funciones a algún cargo de confianza cuando su superior deja de fiarse de él.
¿Sabían ustedes que el término “mala praxis” fue utilizado por el Colegio de Médicos en un espeluznante informe que emitió en relación con 34 de los casos denunciados y que la comisión de expertos –entre ellos médicos de primera línea- creada para investigar el escándalo del Severo Ochoa concluyó que en 73 de los casos estudiados y que se encuadraban en el periodo que media entre septiembre de 2003 y mayo de 2005 se administraron “sedaciones inadecuadas o no indicadas” y en cuatro casos “expresamente contraindicadas”? ¿Sabían ustedes que es imposible determinar si la sedación administrada por el doctor Montes y su equipo a personas mayores fue la causa de su muerte debido a que no se practicaron las autopsias en su momento?
Es más… ¿sabían ustedes que el único que acusó y pronunció la palabra eutanasia (literalmente: “eutanasia masiva”) en relación con lo acontecido en el Severo Ochoa fue un tal Rafael Simancas? Supongo que el doctor Montes, que anda por ahí en plan digno amenazando a diestro y siniestro con querellas, empezará por el socialista Simancas, ahora en las listas al Congreso de los Diputados por Madrid.
¿Se imaginan cómo se tienen que sentir los familiares de las personas que fallecieron en el Severo Ochoa por una sedación “inadecuada o no indicada” viendo al doctor Montes convocar ruedas de prensa y siendo elevado a la categoría de mártir por la izquierda? Supongo que Rodríguez Zapatero, Elena Salgado, Bernat Soria y el ministro Bermejo, tan fans de “Mar adentro”, ya habrán contratado, para ellos y sus familiares, los servicios de ese, según ellos, gran doctor apellidado Montes. Es más, ya están tardando en ficharlo como médico de cabecera de Ferraz.
Finalmente, si no saben ustedes qué opinar acerca de este asunto, permítanme simplemente plantearles una cuestión: ¿dejarían ustedes a sus padres o hijos en manos del doctor Montes? Es tan sencillo como eso.
http://diariosigloxxi.com/noticia.php?id=31147
Me refiero al macabro follón que desde el PSOE se está intentando organizar con la excusa de una sentencia (que yo acato, faltaría más, pero no tengo por qué respetar; es decir no tiene por qué parecerme bien y, como aún existe la libertad de expresión, puedo decirlo. De hecho, algunas sentencias me parecen vergonzosas) dictada por, entre otros, dos jueces, uno de ellos vinculado a la política y socialista Fundación Alternativas, que en su día suscribieron un manifiesto a favor de la eutanasia- con respecto a lo sucedido en el madrileño hospital Severo Ochoa, cuyo servicio de urgencias era dirigido, hasta estallar el escándalo por todos conocidos, por el doctor Montes. Vamos, que el PSOE está volviendo a hacer lo habitual: chapotear en sangre a ver si recoge algún fruto en forma de voto.
Vamos a los hechos: ¿sabían ustedes que el índice de mortalidad en el servicio de urgencias disminuyó un 55% tras ser cesado el doctor Montes? 55%. Se dice pronto; hablamos de vidas humanas y parecería normal que la labor de un médico que cumpliera con su juramento hipocrático fuera salvar vidas. También parecería normal que el mejor gestor de un servicio de urgencias fuera aquel bajo cuyas órdenes un mayor número de pacientes salvaran sus vidas. Pues no. Parece ser que para la izquierda esto no es lo normal. Lo de “médico salvar vidas” debe ser “un concepto discutido y discutible”.
¿Sabían ustedes que el puesto de trabajo del cual fue cesado es un puesto de confianza, o sea, de libre designación y que es algo muy normal ser cesado de esos puestos? Tampoco debe de ser normal para la izquierda cesar en sus funciones a algún cargo de confianza cuando su superior deja de fiarse de él.
¿Sabían ustedes que el término “mala praxis” fue utilizado por el Colegio de Médicos en un espeluznante informe que emitió en relación con 34 de los casos denunciados y que la comisión de expertos –entre ellos médicos de primera línea- creada para investigar el escándalo del Severo Ochoa concluyó que en 73 de los casos estudiados y que se encuadraban en el periodo que media entre septiembre de 2003 y mayo de 2005 se administraron “sedaciones inadecuadas o no indicadas” y en cuatro casos “expresamente contraindicadas”? ¿Sabían ustedes que es imposible determinar si la sedación administrada por el doctor Montes y su equipo a personas mayores fue la causa de su muerte debido a que no se practicaron las autopsias en su momento?
Es más… ¿sabían ustedes que el único que acusó y pronunció la palabra eutanasia (literalmente: “eutanasia masiva”) en relación con lo acontecido en el Severo Ochoa fue un tal Rafael Simancas? Supongo que el doctor Montes, que anda por ahí en plan digno amenazando a diestro y siniestro con querellas, empezará por el socialista Simancas, ahora en las listas al Congreso de los Diputados por Madrid.
¿Se imaginan cómo se tienen que sentir los familiares de las personas que fallecieron en el Severo Ochoa por una sedación “inadecuada o no indicada” viendo al doctor Montes convocar ruedas de prensa y siendo elevado a la categoría de mártir por la izquierda? Supongo que Rodríguez Zapatero, Elena Salgado, Bernat Soria y el ministro Bermejo, tan fans de “Mar adentro”, ya habrán contratado, para ellos y sus familiares, los servicios de ese, según ellos, gran doctor apellidado Montes. Es más, ya están tardando en ficharlo como médico de cabecera de Ferraz.
Finalmente, si no saben ustedes qué opinar acerca de este asunto, permítanme simplemente plantearles una cuestión: ¿dejarían ustedes a sus padres o hijos en manos del doctor Montes? Es tan sencillo como eso.
http://diariosigloxxi.com/noticia.php?id=31147
5 comentarios:
El ABC tiene un problema: su director, Don José Antonio Zarzalejos Nieto, hijo de DON JOSE ANTONIO ZARZALEJOS ALTARES
montes temes
Conferencia en la Universidad Menéndez y Pelayo de Santander del Doctor Montes
carlos bueren pérez de la serna, leganés (madrid)
montes mieza
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