Empieza a cundir el pánico
Parece que el pánico empieza a cundir en las filas nacional-socialistas. Hoy Durán Lleida advierte que si fracasa el referéndum la responsabilidad será de Maragall; ayer Roca firmaba un articulito en La Vanguardia que se titulaba "Por favor", y resultaba francamente lacrimógeno; hace un par de días un tal Puigverd, nacionalista acérrimo clamaba por que se aprobase y luego ya discutiríamos, "por el bien de Cataluña"; hoy mismo dice la propia Vanguardia que "el gobierno (refiriéndose al de Madrid) teme que un fracaso del referéndum suponga el hundimiento de Cataluña". Pujol lleva semanas haciendo advertencias apocalípticas desde su Sinaí particular junto a la casa Batlló.
Por supuesto que aquí hay mucha maniobra movilizadora, en el sentido de que "si no votáis, el diluvio". Pero parece que la posibilidad de un fracaso toma cuerpo. Las consecuencias de ello son una incógnita. Por supuesto que devolvería a Cataluña a la edad de piedra política y supondría un mazazo tremendo para el nacionalismo en general, que quedaría desnortado. Pero propiciaría una radicalización de ERC que capitalizaría la frustración de mucho nacionalista. ¿Se beneficiaría el PP? Difícil. Es más, el otro día decía Fabián Estapé que esto huele a una mayoría absoluta del PSC sin Maragall, como supuesta (incomprensible) reacción a los excesos nacionalistas, que se atribuirían a la nefasta influencia de los de Esquerra. Cosas veredes.....
Pero el hecho cierto es que el lamentable espectáculo de un presidente pidiendo el voto antes incluso de concluir el trámite parlamentario, mientras el conseller en cap pide directamente el no, representa un caos tan notable que puede acabar enviando a la gente en masa a las playas en lugar de a las urnas.
Aún hay más incertidumbres: ¿qué pasa si el resultado es terriblemente exiguo? ERC se lanzará a pedir la reforma a partir del día siguiente, y CiU no podrá quedarse atrás: a nacionalistas no les ha de ganar nadie. Más tensión, y probable saturación, entonces sí, del electorado socialista del resto de España. Pero también puede pasar que el no de ERC empuje a indecisos a votar sí: "entre los noes del PP y los de ERC, señal de que el estatuto debe estar bastante centrado".
Por supuesto que aquí hay mucha maniobra movilizadora, en el sentido de que "si no votáis, el diluvio". Pero parece que la posibilidad de un fracaso toma cuerpo. Las consecuencias de ello son una incógnita. Por supuesto que devolvería a Cataluña a la edad de piedra política y supondría un mazazo tremendo para el nacionalismo en general, que quedaría desnortado. Pero propiciaría una radicalización de ERC que capitalizaría la frustración de mucho nacionalista. ¿Se beneficiaría el PP? Difícil. Es más, el otro día decía Fabián Estapé que esto huele a una mayoría absoluta del PSC sin Maragall, como supuesta (incomprensible) reacción a los excesos nacionalistas, que se atribuirían a la nefasta influencia de los de Esquerra. Cosas veredes.....
Pero el hecho cierto es que el lamentable espectáculo de un presidente pidiendo el voto antes incluso de concluir el trámite parlamentario, mientras el conseller en cap pide directamente el no, representa un caos tan notable que puede acabar enviando a la gente en masa a las playas en lugar de a las urnas.
Aún hay más incertidumbres: ¿qué pasa si el resultado es terriblemente exiguo? ERC se lanzará a pedir la reforma a partir del día siguiente, y CiU no podrá quedarse atrás: a nacionalistas no les ha de ganar nadie. Más tensión, y probable saturación, entonces sí, del electorado socialista del resto de España. Pero también puede pasar que el no de ERC empuje a indecisos a votar sí: "entre los noes del PP y los de ERC, señal de que el estatuto debe estar bastante centrado".
Todas las opciones están abiertas. Lo cual ya es mucho más de lo que esperábamos hace unos meses.
Germont
5 comentarios:
La verdad es que no sé cómo va a acabar ésto.
De todos modos, a ERC se le ha acabado el chollo. Eso de pisar alfombras rojas y tener coches oficiales, se ha acabado.
Saludos!!
No creo que a ERC se le haya acabado el chollo sino más bien estamos ante otro paripé nazianal-sociali$ta.
Rodríguez el Traidor va a pasar a la Historia por destruir la Democracia en España, embroncar la convivencia, abrir una tremenda brecha emocional y por ser un IMBÉCIL sin cura posible.
Buen artículo, Germont. Te lo he enlazado a Batiburrillo.
Saludos cordiales.
No soy tan pesimista como mi buen amigo el cerrajero. En todo caso si la detrucción de la democracia es posible es porque ésta es muy dbil y necesita ser regenerada. En ´definitiva ZP está poniendo al personal ante su responsabiliad. Aquí si soy más pesimista. ¿Dónde estan los hombres, las mujeres libres? Ánimo compatriotas catalanes. Resistid.
Si yo fuera catalán -y hace años lo fui- estaría abochornado. ¿Qué monstruo deforme ha crecido en mi Barcelona, desde que la dejé, hace muchos años?
Ánimo amigos.
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