martes, abril 29, 2008

Desde mi trinchera liberal: Una economía Subprime.


Publicado en www.aragonliberal.es

El dato produce agobio sólo de pensarlo: Constructoras e inmobiliarias españolas deben tres veces lo que tienen. Y ojo que estamos hablando de las cotizadas, la punta del iceberg. Nosotros no tenemos una crisis de hipotecas subprime, nos dicen con sonrisa tranquilizadora, y tienen parte de razón. Porque lo que tenemos es algo mucho más grave: un problema de economía subprime. De basura.

Hace falta demasiada ingenuidad. esa perversión del optimismo, para creer que el endeudamiento insostenible que sufre España, y que afecta a familias y a empresas, no va a acabar emborronando los libros de balances de nuestros bancos y cajas.

Los bancos van a tener que cocinar como puedan un guiso demasiado complejo. Aumento de morosidad, financiaciones alocadas, ralentización económica y sequía crediticia. España es el segundo importador de capitales del mundo, con amortización a corto plazo, mientras que obtiene su liquidez básicamente de las hipotecas, que se amortizan a largo plazo. Si es que se acaban amortizando y los bancos no se convierten en las nuevas agencias inmobiliarias. Es el momento de los fondos buitre y oportunistas, vehículos que invierten en empresas, activos inmobiliarios o deuda con problemas. A mayor riesgo, mayor rentabilidad, una cerilla que se va pasando de mano en mano hasta que alguien se la quema.

¿A qué clavo ardiendo nos podemos agarrar? ¿A la exportación? Ni hablar. La balanza comercial no hace más que ahondar en su desiquilibrio. Decía aquel gran empresario vasco, Luis Olarra, que la clave económica de un país era exportar, exportar y exportar. Lo demás, decía, son puñetas. Exportar, y exportar a precio que no sea de granel, sigue siendo una de nuestras asignaturas pendientes. Y seguimos repitiendo curso.

Vamos con la imagen de la marca. Si damos una vuelta por cualquier aeropuerto de Europa, no digamos de otras latitudes, nos damos cuenta del déficit de marca que tienen los productos españoles. El made in Spain vende muy poco y se vende muy mal. Sólo nos luce el sol y la sangría en tetrabrick, para consumo de una clase turística de nivel bajo. Sin novedades.

Nos queda el valor añadido, pero eso es un quimera sin ser punteros en tecnología. Pongo zimplemente un ejemplo. Se pueden contar con los dedos de una mano las empresas de ingeniería españolas que se sitúan entre las cien primeras europeas. Dinamarca, un país casi diez veces más pequeño que España, tiene el doble. Parecido Holanda. No digamos los grandes de Europa. Claro que para nuestro Zapatero vamos a jugar en la champions de la economía europea. Será dando sombra al botijo.

viernes, abril 25, 2008

Nueva atracción: el Gran Circo Popular

Por Germont.
El Gran Circo Popular ha decidido renovar su repertorio con un nuevo y escalofriante número: el domador se encerrará en una jaula con fieras de procedencia diversa, exponentes de la rica diversidad zoológica del territorio nacional, intentando un acercamiento que hasta ahora nadie ha realizado con éxito. Llegará incluso a introducir la cabeza en las fauces de las bestias, en un audaz intento de demostrarles una simpatía que acabe por enternecerlas para a continuación obligarlas a realizar todo tipo de piruetas.

Algunos agoreros advierten de que el estado de permanente hambre de estas peculiares fieras periféricas situará en altísimo riesgo la cabeza del domador. Hay quienes piensan que eso, en definitiva, no sería tan grave pérdida, pero en cualquier caso el domador insiste en su convicción de que las fieras muerden básicamente cuando sienten antipatía, por lo cual ha decidido renunciar a los tradicionales látigo y silla y sustituirlos por dosis masivas de caricias y halagos.
A ver, panda de merluzos, repitan conmigo: los nacionalistas son independentistas. Todos sin excepción. Es incluso legítimo, no discutamos eso ahora, pero son independentistas. Su única razón de existir es la aspiración de conseguir un estado independiente y soberano que se desgaje de la Corona de España. Cualquier vía les sirve, pero todas sin excepción pasan por la necesidad ineludible de que previamente el Reino se haya debilitado hasta tal punto que cuando llegue el momento no pueda ofrecer resistencia suficiente. Cualquier paso que den es en esa dirección, no se van a conformar con ninguna estación intermedia, entre otras cosas porque ya las han rebasado todas. Por lo tanto, ningún partido nacional que aspire a gobernar una España que continúe unida tiene nada que obtener de un acercamiento a los nacionalistas. El nacionalismo se derrite de gusto cada vez que piensa en un gobierno español en minoría que necesite de sus escaños para poder ejercer el poder. No van a ceder nada por mucho que se les acerquen. Por el contrario, lo aprovecharán para dar más pasos en pos de su objetivo, pasos que siempre son irreversibles mientras nadie les plante cara.
Así que, señor Rajoy, si desea usted suicidarse hágalo solo, pero no nos suicide a los demás con usted. Simpatía sí, a raudales, pero con el público que le paga. Al tratar con las fieras que llevan la voracidad en su propia naturaleza no olvide el látigo, la silla, y hasta un revólver en el bolsillo de la casaca. No hay nada más simpático que la convicción, la firmeza y la claridad en la explicación de las propias convicciones. Y para eso nada mejor que hacer restallar el látigo de cuando en cuando, aunque sea con la sonrisa en los labios.

martes, abril 22, 2008

Desde mi trinchera liberal: el centro político y la geometría.



Publicado en www.aragonliberal.es
la geometría es la ciencia que estudia las idealizaciones del espacio. Ahora, mucha gente quiere arrimarse a esa entelequia del centro político. No sé de dónde vengo ni tampoco a dónde voy exactamente, pero el centro me parece un país templado, agradable, común, poco problemático, casi angelical, es lo que se escucha. En la geometría euclidiana, y aunque, como dice mi amigo Rafael Ariza, ya esté superada, el centro político sería el punto medio de un segmento.

Es decir, es único y equidista de los extremos del segmento. Ahí está el centro, brevemente definido y con la cómoda garantía de que equidista de los dos extremos. A partir de aquí, todo se explica como un recorrido hacia un sentido u otro, huyendo más o menos de los extremos, hasta encontrarse en el centro prometido. Dicho así, pinta muy bien.

Pero aplicar esta geometría descriptiva lo único que demuestra, en mi opinión, es un déficit de ideología. Un vaciamiento. En definitiva, un artificio. Las ideologías no se mueven en la misma recta. La realidad política no se describe mediante segmentos, por muy hermosa y unificadora que nos suene esta arquitectura. Las ideologías políticas puras se mueven en rectas paralelas, que ni se cortan ni coinciden. Son planteamientos antagónicos. Un socialista discurrirá, por definición, en paralelo a un liberal, por ejemplo. Y viceversa.

Lo cual no quiere decir que no existan consensos. Para mí eso es simplemente fruto de una "violencia" operativa. Aunque sea algo bueno y necesario en ocasiones, no dejan de ser puentes que se tienden entre dos orillas opuestas. No es mezcla sino recurso. Cuando uno se casa, lo hace con la hija y no con la suegra, aunque nos cueste creerlo. Pero son, o deberían ser, proyectos de vida paralelos, aunque nos cueste aún más creerlo. Lo cual no quiere decir que no se quede un domingo a comer con la familia política. A eso voy. Quizá el ejemplo no haya sido del todo procedente, entre bromas y veras, pero ya me entienden. Sobre todo, los casados.

En conclusión, la definición que se da como centro político, no digamos moral, es un paisaje desdibujado, sin contornos ni tonalidades. Algo amorfo, pragmático y de conveniencia. Un relativismo que conduce a la indiferencia y a la pérdida de conciencia. Otros buscamos justamente lo contrario.

jueves, abril 17, 2008

Desde mi trinchera liberal: Rejón a Solbes


Publicado en www.aragonliberal.es

Excusatio non petita, accusatio manifesta, reza rotundo el latinajo. Mal empieza el Sr Solbes su andadura en esta nueva legislatura cuando tiene que empezar reivindicándose a sí mismo. En Nueva York, durante la reunión del FMI, Pedro Solbes ha declarado, ante preguntas que remarcaban a un emergente Sebastián en el nuevo gobierno, que "el vicepresindente económico soy yo".

Hay consenso en la plaza pública. Solbes es el pretexto de Zapatero, y Sebastián el texto. Solbes la imagen y Sebastián el argumento.Por un lado, Zapatero explota la imagen de cierto rigor, de aprobado raso entre los ciudanos españoles, que tiene Solbes y por el otro premia a Sebastián por los servicios prestados. Hueso para el sabueso. Ahora Solbes va a empezar a sentir el frío filo del talante. Talante por delante, talantazo por detrás. Y vuélvete a agachar.

En realidad, lo único que ha hecho Zapatero es dar categoría miniesterial a subterránea Oficina Económica de Moncloa. Ya no tendrá Sebastián que acudir a Moncloa por la puerta de atrás, sino en coche oficial y con tuteo a Solbes en las reuniones del Consejo de Ministros. No ha venido sólo Sebastián al Ministerio de Industria, que ha colocado también a gente de su corte en Innovación y en Vivienda. Esto nos da una idea de hacia dónde piensa inlinar Zapatero la balanza por la batalla del liderazgo entre Solbes y Sebastián. Ganará el más sectario.

Auténtico pavor ha causado entre los empresarios el nombramiento de Sebastián, mucho más temido por su mano implacablemente intervencionista que respetado por sus virtudes. Los más optimistas pensaron que Madrid enterró políticamente a Sebastián pero no contaron con que Zapatero hace tiempo riñó con el sentido común. Si el necio no fuese al mercado, no se vendería lo malo. Viene bien la picaresca.

sábado, abril 12, 2008

Desde mi trinchera liberal ¡ Qué Gobierno!


Quien bien tiene y mal escoge, por mal que le venga, no se enoje, dice el refranero. Que haya habido bueno donde elegir tiene al menos el beneficio de la duda. Alguno debe haber. De lo mal escogido ya somos sus pacientes. Dos premios para este nuevo gobierno: premio a la incompetencia, al revés me la vestí, ándese así, y premio a la femicuota, aún no ha nacido y ya estornuda.

Por cierto, y a pesar de los buenos resultados obtenidos, de los rumores y deseos, al PSOE aragonés lo han vuelto a dejar como al gallo morón, sin plumas y cacareando. Ni siquiera Morlán, que se encargó brillantemente de ir tapando los socavones que surgían en el AVE a Barcelona cada vez que Magdalena abría la boca, ha obtenido banquillo azul. Eso es reconocimiento, chico. ¿Os harán el mismo caso con el trasvase del Segre?

Y una figurína, cosas de la cuota, ese invento en el fondo machista, se va a defensa. ¿Habrá sido capricho de embarazada? No consigo imaginarme a Carme Chacón paseando su Jané por Afganistan mientras visita a nuestras tropas allí destinadas. Los desfiles militares no tienen nada que ver con la pasarela cibeles. Por si acaso lo digo.

Más de lo mismo, repiten los peores. Bermejo, Moratinos, Magdalena Alvarez y Bernat soria, por citar a los cuatro jinetes del apocalipsis. Entra Sebastían, nada menos que a Industria. Con lo bien que se lleva con Solbes. que no se pueden ni ver. La tormenta perfecta. Justo lo que necesitamos en estos tiempos de crisis. Vayan buscando cura.

jueves, abril 10, 2008

Desde mi trinchera liberal: El ecoalarmismo, la ecofashion


Cuentan la siguiente anécdota sobre el cantante Bob Dylan. Durante una entrevista en la radio, el locutor le preguntó cuál era su opinión sobre el Calentamiento Global. Dylan respondió: "¿ Calentamiento Global? ¿Dónde coño está el Calentamiento Global? Si hace un frío de narices."

La anécdota es ilustrativa de una relidad: el debate sobre el cambio climático, sobre el calentamiento global, ha saltado de las mesas de los científicos para instalarse en la arena pública. Y para eso es suficiente producir cuatro o cinco ideas, como salchicas, que sean de cómodo cacareo, y, a poder, ser, estridentes y catastrofistas. La ecofashion, el ecoalarmismo. Es cierto. Bob Dylan se saltó el guión de respuesta prefabricada y salió por Antequera. Ventajas que tiene estar de vuelta de todo.

Deberíamos marcar los límites entre Ciencia e ideología. La ciencia, por propia definición, ´fructifica en el escepticismo. Huye del slogan y tiende a la discusión, a la contraposición de ideas y a considerar, en ocasiones, al error como método de avance. La ideología política, no digamos en su variante ecosectaria, tiende al dogmatismo y al pastoreo de aquellos ciudadanos más impresionables y menos avisados. A los ciudadanos que, en defintiva, desean comprar cualquier slogan de moda. Ahora para aquí, ahora para allá. Hoy es el calentamiento global, ayer era el peligro de una nueva glaciación. No hay que irse muy lejos. Basta con mirar al último cuarto del Siglo XX. Verdades incómodas pero millonarias para quien supo, y sabe, trajinárselas desde el catastrofismo.

La ecohipocresía. Resulta que para decir en cualquier parte del mundo lo mucho que contamina el maldito hombre, estos projetas del ecoalarmismo se desplazan en sus altamente contaminantes jets privados. El día que alguien fotografíe a Al Gore viajando en un vuelo comercial, que venda la exclusiva. Quizá entonces algunos dejen de partirse la caja con el que cuento de que viene el coco. Organizan macroconciertos, como el Live Aid en julio del 2007, con toda su parafernalia de grupos electrógenos contaminando, un tour de cientos de camiones emitiendo CO2 a la atmósfera, más toda la letanía de medios de transportes necesarios para mover a cientos de miles de asistentes, a los artistas, a los periodistas, más los residuos generados en dos días de concierto, para concienciarnos de lo malo que es hacer precisamente lo que ellos están haciendo. ¿Saben ustedes quién organizó el evento? Naturalmente. Nuestro Al Gorero mediático y climático.

Están muy preocupados por su ideología pero no tanto por las personas. Según el Panel Intergubernamental para el Cambio Climático, IPCC, se necesitan millones de dólares anuales para intentar atajar el cambio climático, aunque no sepamos ni cómo ni en qué medida lo podemos atajar, o, simplemente atrasar. Con mucho menos dinero, se podría, por ejemplo, haber dotado de sistemas de aviso de Tsunamis a países pobres y que tanta tragedia causaron hace ahora poco más de dos años. O se podría controlar el problema de desnutrición en tantos países.

En definitiva, y porque se trata de un debate muy serio, el Cambio Climático debería quedar libres de charlatanes, sacerdotes del arco iris, políticos ideológicamente contaminados y burócratas de destrucción masiva. Como dice Jorge Olcina, director del laboratorio de climatología de la Universidad de Alicante:

"Llevamos años de divulgación indiscriminada del tema del Cambio Climático. En mi opinión, esta cuestión saltó demasiado temprano a la arena pública, dejó demasiado pronto de ser un tema de investigación científica básica de enorme importancia àra el futuro de la humanidad para convertirse en un slogan fácil"

domingo, abril 06, 2008

Desde mi trinchera liberal: Nucleares, ¿Sí, gracias?


Yo lo siento por cuantas lechugas platónicas, verdes idealistas, y biciecologistas en porreta pedalean por aquí. Pero creo que hay que empezar a abrir el debate de la energía nuclear en toda su intensidad. La energía nuclear no es la solución ideal. Aunque...¿Hay otra?

Tras una visita a la Central Nuclear de Almaraz (Cáceres),el secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT), Cándido Méndez, ha afirmado hoy que sin la energía nuclear no hay "ningún escenario energético razonable" en España "de aquí al 2050". Cándido lleva tiempo de avanzadilla de algo. Sin reactores no hay paraiso. Y es que el debate de la Energía Nuclear en España sólo se puede abrir desde la izquierda. Lo contrario nos llevaría a un revolución.

El riesgo nuclear no conoce fronteras. Los franceses producen el 80% de su energía mediante centrales nucleares, algunas de ellas situadas en los Pirineos franceses, muy cerca de la frontera española. Los franceses luego nos venden la energía. Lo lógico parece invertir el proceso y producir la energía nuclear aquí. De hecho, existe el rumor de que Zapatero y Sarkozy han pactado la entrada de EDF en Iberdrola a cambio de que la española gestione parte de la energía nuclear en ese país. Evitar el escándalo en casa pero apostando, en defintiva, por las centrales nucleares.

El panorama energético en España es desolador, extremadamente dependiente del exterior y lesivo para los intereses de los ciudadanos y las empresas. Desde los tiempos de los tecnócratas franquistas, que hicieron las cosas bastante como Dios manda, no hay una política energética en España seria y eficaz. Nos guste más o menos, no parece haber otra salida que el "mix" energético. Y aún así, con todo haremos corto.

En cualquier caso, es un debate de cierta urgencia. Nada más y nada menos que cuarenta naciones, cuarenta, tienen planes de desarrollo de nuevas centrales a día de hoy. Se espera que el parque de centrales nucleares crezca, a nivel mundial, un 25% de aquí a 2020 y casi el 75% en 2030. El proceso completo de la construcción de una central se demora un plazo medio de unos diez años entre localización, licencias y construcción. ¿Estamos dispuestos a pagar la factura del progreso?

martes, abril 01, 2008

La niña de Rajoy

Por Germont: Supongo que no es una comparación muy original, y que estará en labios de mucha gente estos días, pero es que resulta inevitable. Soraya Sáenz de Santamaría ha pasado a ser ya, por derecho propio, la niña de Rajoy.
Está resultando muy extraña la actitud del líder popular tras las elecciones. No parece el mismo de antes. No tengo muy claro si está pasando por lo que los ciclistas (deporte muy caro a Rajoy) llaman una pájara, si por el contrario está en una especie de fase de despecho, o si se está endiosando por momentos, pero su actitud creo que está dejando aturdidos incluso a quienes han sido sus más fieles adeptos en la campaña. Es probable que algún plan bien elaborado se haya construido en su cabeza, y que todo este comportamiento obedezca realmente a unos motivos definidos. Y aún así, eso no acabaría de explicar esos secretismos, tanto misterio. Pero lo cierto es que, si el plan existe y es bueno, no lo parece. Ninguna de las dos cosas.
Pío García Escudero ha peleado bien en el Senado, y de hecho creo que los mayores vapuleos que Zapatero se ha llevado se los ha propinado precisamente él. No me parece mal que siga ahí, si bien el resultado de la campaña electoral, en la que participó como una de las cabezas pensantes, podría haber aconsejado una mayor humildad. Pero bueno: el número de votos aumentó, y su trabajo como portavoz fue bueno, así que por qué no seguir.
Pero Soraya… A ver, que muchos pedíamos y pedimos renovación, caras nuevas. Pero Soraya… Que el puesto de portavoz de la oposición en el Congreso de los Diputados es muy, muy importante. El más visible después del líder. Que hay que pelearse a diario con auténticos tiburones, que hay que aguantar día tras día embestidas de todos, sí, todos los restantes portavoces, más preocupados por atacar al PP que al gobierno socialista. ¿Qué experiencia tiene Soraya para tan alto cargo? Pasar de Zaplana a Soraya, ¿no es un cambio demasiado radical? ¿Estamos en buenas manos?
Yo estoy muy preocupado desde el 9 de marzo, de verdad. Mucho.