miércoles, septiembre 26, 2007

Caldera solidario

Por Almudena Negro


“La Seguridad Social es una pieza fundamental de nuestro Estado (sic) del bienestar que tiene como principio básico la solidaridad. Solidaridad entre generaciones, pues los recursos aportados hoy permitirán hacer frente a las pensiones del mañana. Y solidaridad de los trabajadores y empresarios con el conjunto de la sociedad, porque su esfuerzo contribuye al bienestar de todos. (…) Para que esto sea posible la Seguridad Social necesita tu cotización. Se trata de un esfuerzo importante que, sin embargo, merece la pena… además te hace solidario”.

No, no es una redacción escrita por un alumno mediocre de la ESO. Qué va. Son fragmentos extraídos de la carta-panfleto-anuncio que el ministro Jesús Caldera, alias “Míster Tippex” y aspirante a ministro de Economía si ZP logra volver a ganar las elecciones generales, está enviando, con dinero de todos los contribuyentes y cotizantes, a los jóvenes que, forzosamente y porque han accedido al mercado laboral, se incorporan al sistema de la Seguridad Social. Sistema, que, por cierto, es piramidal como lo era el sistema de las empresas Afinsa y Fórum: si no cotiza nadie el chiringuito se viene abajo. Y, sin embargo, nadie criminaliza en este caso el invento.

Resulta curiosa la reiterada apelación a la palabra “solidaridad” cuando se está hablando de la Seguridad Social. Y es que la solidaridad, como la caridad, suelen ser voluntarias. Y el cotizar a la Seguridad Social no es, precisamente, un acto voluntario. Los ciudadanos entregan parte de su salario al Estado porque no les queda otro remedio. Luego muchos de ellos se pagan por su cuenta un plan de pensiones y una sanidad privados.

Pero, según nuestros socialistas, el que Estado coactivamente te robe legalmente parte de los beneficios que obtienes a cambio de tu esfuerzo, se llama solidaridad.

Y nuestros socialistas –y todos los socialistas del mundo; a izquierdas y derechas- se pasan el día presumiendo de solidarios… con dinero ajeno. Que viene a ser, visto lo visto, lo mismo que presumir de latrocinio. Pues qué bien.

Almudena Negro

No hay comentarios: