La Tierra es hueca

Lo pasé en grande la otra tarde navegando por internet, enlazando unas con otras páginas absolutamente inefables, hasta que encontré un hilo conductor que de enlace en enlace me demostró, con todo tipo de datos, algo que nunca había sospechado: la Tierra es hueca, y además tiene unos enormes agujeros de entrada por los polos.

Sí, no es para reír: resulta que eso de que la Tierra es maciza y está llena de no sé qué sustancias en ignición y demás es totalmente falso. De hecho, lo que expulsan por ejemplo los volcanes puede generarse en una capa de apenas mil kilómetros de profundidad. Lo bueno está más adentro: resulta que dentro hay otro mundo, vive gente, con una civilización mucho más avanzada que la nuestra, y que es la que ha creado los ovnis que periódicamente se avistan.

Está científicamente demostrado (sí, sí: científicamente, que lo dice la web) que en una expedición a la Antártida un almirante británico se topó, al doblar tras un iceberg, con feraces valles y frondosos bosques que se introducían hacia el interior de la Tierra, y allí salieron a recibirle unos señores muy estirados y muy elegantes que le condujeron al mismísimo meollo de la Tierra.

Y no sabéis aún lo mejor: resulta que esos habitantes misteriosos son en realidad... ¡los nazis que escaparon a la caída de Berlín! De hecho, el propio Hitler nunca murió en el búnker, según esta revolucionaria teoría que, por supuesto, los poderes fácticos, fácilmente reconocibles o no, se encargan de tapar. El Führer y varias decenas de miles de alemanes huyeron en submarinos (vamos, una flota de submarinos de la ostia, pero es que los alemanes llevaban tiempo preparándose, y ya sabemos cómo son), cruzaron los mares y llegaron a la Antártida, donde ya el almirante Doenitz había construido un nuevo Shangri-la. ¿Que cómo escapó Hitler del búnker? Bueno, parece mentira... ¡pero si todo el mundo sabe que todo Berlín estaba trufado de auténticas autopistas subterráneas que permitían ir de la Cancillería al aeropuerto!

Todo esto lo he leído en la red, os lo prometo. Al que le interese y quiera pasar un buen rato le indicaré los enlaces. Tienen momentos impagables y aportan documentos “escalofriantes”. Hay hasta una foto del boquete por el que se entra (censurada, claro). Y lo bueno es que hay quien cree sinceramente en ello. Bueno, tampoco hay que extrañarse: también hay quien cree que el 11 – M lo organizó un esquizofrénico asturiano con una pandilla de moros vendedores de móviles en el top manta, así que...



Germont