jueves, mayo 25, 2006

Qué grande es la izquierda

Titula hoy La Vanguardia, con sus habituales caracteres colosales: "Los asaltos a chalets cuestionan el modelo urbanístico". Hay que jorobarse. Ahora resulta que el hecho de que existan auténticas bandas de albano-kosovares-moldavos-rumanos-andformerJugoslavia saqueando a placer se debe al modelo urbanístico. No sé si notáis la sutileza, pero de ahí a culpar al capitalismo salvaje, al afán consumista y a la sociedad competitiva va un paso. Nada que ver, en cambio, con leyes de extranjería demenciales, con códigos penales de plastilina, con políticas de reinserción progresistas.

No es que los delincuentes en cuestión sean productos y excrecencias de los regímenes del socialismo real, criados en la violencia, la impunidad, la corrupción y la miseria, y que se dediquen a robar plácidamente en un país en el que las leyes casi invitan a ello. No. Se trata de excluidos sociales que no han podido adaptarse a las exigencias inhumanas de la sociedad competitiva y ultraliberal, y que ante la provocación que supone el desarrollo urbanístico que se empeña en imponernos el sistema, reaccionan como modernos Robin Hood.

Si es que no lo entendemos.




Germont

1 comentario:

Anónimo dijo...

El gobierno catalan desterro a la guardia civil de aquel territorio para desplegar fuerzas de seguridad autóctonoas, con aroma nacional. Ahora, piden refuerzos. El gobierno catalan no los quiso despedir, pero los ciudadanos los recibien con alivio.