¡¡¡¡Opá , voy a hacer una nación!!!!
EL gran éxito de "Opá, yo viacé un corrá" viene en el momento preciso y sienta las bases de la futura lengua propia de Andalucía. Por ahora tenemos que conformarnos con una prestada.
Si se pueden hacer naciones con los votos de un Parlamento, cuando hasta hace nada eran necesarios siglos, guerras, desapariciones de pueblos, invasiones, conquistas territoriales y culturales, lenguas, religiones y particularidades étnicas notables, con mucha más facilidad se pueden crear lenguas.
Los vascos lo hicieron con los dialectos vascuences, los inventores del esperanto y del volapuk sacaron lenguas de su cabeza y los israelíes han conseguido -creo que son los únicos- que el hebreo, lengua muerta y litúrgica, vuelva a ser lengua hablada.He oído en la radio un comentario que no nos favorece y que cito de memoria: "En España, cuando oímos hablar de nación catalana y, sobretodo, de nación vasca, nos echamos a temblar; pero cuando oímos hablar de nación andaluza, nos echamos a reír". Estamos dando pie para que se rían de nosotros.Si los vascones formaron un remoto pueblo prerromano, no una nación, y Cataluña fue en una época lejana condado independiente, tampoco una nación, imagínense Andalucía, cuya realidad actual empieza en el siglo XIII con la Reconquista y las repoblaciones, previa expulsión de los musulmanes, y se fija en el XIX por obra y gracia de los viajeros románticos.
La imagen andaluza de los extranjeros nos cayó bien y la aceptamos como verdadera y propia. Creo que la palabra "nación" ha perdido su sentido y se usa alegremente para desconcierto de desprevenidos, de otro modo no se explica la redundancia "nación histórica" ni la expresión "hecho diferencial", que más parece un cálculo matemático o la pieza de una máquina que la reclamación de unas diferencias sentimentales, no reales, existentes de persona a persona, cuánto más entre regiones de una misma nación.
Los nacionalistas vascos hicieron historia de las leyendas aprovechando la prosperidad del siglo XIX, hilvanaron una lengua bastante inservible con retazos de dialectos y se midieron el cráneo para buscar una raza pura. Los catalanes, también en un momento boyante, resaltaron, aparte de una hermosa lengua romance parecida a la española, las pocas diferencias con el resto de Españay callaron las muchas afinidades. Una historia común nunca fue enbalde.Lo considerado andaluz es un invento que ni siquiera es andaluz. Los rasgos generales de una región cuando se acentúan y exageran se vuelven falsificaciones y disfraces. ¿Sobre qué vamos a construir una nación andaluza? Habrá que buscar rasgos solamente andaluces que no existan en ningún otro lugar de España y del mundo. Nos quedamos con bastante poco: ¿la Semana Santa y las romerías multitudinarias?,¿las sevillanas y el traje de gitana?, ¿la copla y el exportablegazpacho? Las naciones creadas por ensalmo caen fácilmente en elabsurdo, unas veces por el lado trágico y otras por el ridículo.
1 comentario:
Ja Ja. ZP debe cantar eso de "Opá, voy a hacer una nación". Se aburre y nos quiere bombardear con 17 naciones...
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