Hacer del vicio virtud
Por Bachiller
La frase conocida "hacer de la necesidad virtud" entraña una cierta astucia, un hacer espabilado consistente en considerar bueno aquello que ha de hacerse a la fuerza, aunque sea con desagrado.
Pero en el Congreso de los Diputados de España ha nacido otra máxima más perversa y con mayor carga de inmoralidad que la anterior: "hacer del vicio virtud". Probablemente no tendrá precedente latino, no creo que ese proceder lo concieran los padres del Derecho.
Hacer del vicio virtud es el triunfo de la inmoralidad, de la desvergüenza. Y es lo ocurrido en la votación de la repobración de la Mini-ministra Álvarez. Que los parlamentarios autonómicos gallegos y vascos hayan votado a favor de la Mini-ministra Álvarez a cambio de dinero, y que los primeros se jacten de ello, supera la desvergüenza de la representación política, el todo vale. Porque si la Constitución mantiene que los representantes del pueblo no están sujetos a mandato imperativo, es decir a directrices ajenas, habrá que considerar que ese principio abarca también a la compra del voto...
Ignoro si el parlamento refleja a la moralidad del pueblo español, o el pueblo español está influenciado, moralmente, por las actitudes de los parlamentarios. Probablemente ambas cosas. Pero con actuaciones así, con votos en contra de la conciencia a cambio de dinero presupuestario para determinados territorios, asistimos a un ejemplo perverso del manejo de fondos pùblicos.
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