domingo, enero 01, 2006

The great pretender

Nuestro presidente, el gran fatuo, el enorme presuntuoso, el solemne engolado, el vano impostado, el vacuo parlanchín, ha acuñado un nuevo término: "patriotismo social", se llama el engendro.

Primero fue el "engaño masivo", después el "ansia infinita de paz", luego ha sido modificar la constitución para cambiar "discapacitados" por "disminuídos", antes el uso del término "matrimonio" para designar las uniones homosexuales, en medio la "alianza de civilizaciones",... No quedará piedra sobre piedra, ni en el país ni en el diccionario, cuando este hombre sabio acabe su mandato.

Como decía la canción, "y así pasan los días", inventando expresiones y términos vacíos de contenido, hinchando globos con el aire de la vanidad y la autosatisfacción, lanzando toneladas de fuegos artificiales y artificiosos para distraer la atención del pueblo soberano precisamente para que no se dé cuenta de que deja de ser justamente eso, soberano. Mañana la prensa adicta irá llena de "patriotismo social", sesudos analistas elogiarán al creador y hasta en Damasco se asombrarán de la facilidad innata del líder para descubrir términos e ideas geniales que estaban ahí, desde siempre, solo esperando a que un hombre puro, un héroe casi wagneriano, las descubriese y las revelase a la masa ignorante.

¡Gloria al líder, loor al creador de ideas, alabado seas, genial creador de inmensas pompas de jabón!

El proverbio dice que "cuando el dedo señala la luna, el tonto mira el dedo". En nuestro caso, cabría decir que "cuando el tonto señala la luna, vigila porque está intentando distraerte".


Germont

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy interesante el blog Galicia Liberal, y el blog My guide to your galaxy